Configuración de las ideas
Nuestro conocimiento del mundo y de nosotros mismos se expresa a través de las ideas. Las ideas se constituyen desde una vivencia de la realidad que se traduce en un juicio de ella.
Para entender mejor el concepto de idea y su configuración, debemos precisar lo que se quiere decir con vivencia de la realidad y juicio de la realidad según lo definió K. Jaspers.
Vivencia de realidad
La vivencia de la realidad no se puede derivar, ni poner en el mismo grado con otros fenómenos afines; tan sólo se la puede describir indirectamente, como fenómeno originario. Para ello debemos tomar en cuenta los siguientes factores:
• Real es lo que percibimos corporalmente.
A diferencia de nuestras representaciones, todos los contenidos de la percepción tienen una cualidad que no está en las sensaciones de los órganos (por ejemplo, del ojo o del oído), sino en el modo de lo sentido: ese algo originario, que podemos describir, denominar, pero no derivar de otros fenómenos. Esto es es la realidad sensorial.
• La realidad está en la conciencia del ser como tal.
Incluso cuando percibimos corporalmente, puede faltarnos la conciencia de la realidad. Ésta se pierde en la “extrañeza” de la percepción tanto del mundo externo (desrealización) como de la propia existencia (despersonalización).
• Real es lo que nos ofrece resistencia.
La resistencia es lo que contiene el movimiento de nuestro cuerpo, y resistencia es todo lo que impide directamente la realización de nuestra aspiración y de nuestro deseo. Alcanzar un objetivo contra las resistencias, lo mismo que estrellarse en las resistencias, significa ‘experienciar’ la realidad. Por esto, toda vivencia de la realidad tiene una raíz en la práctica. Pero lo que en la práctica es realidad, es un constante significar las cosas, procesos, situaciones. En la significación puedo captar la realidad.
Educación y cultura
La vivencia de la realidad es tanto un saber acerca de la realidad que me concierne, como también que esta realidad que me concierne está encajada en la realidad general. La vivencia de realidad se estructura y desarrolla en su contenido mediante la tradición y la cultura en las que he crecido y en que he sido educado.
Juicio de realidad
Desde la vivencia de la realidad que percibimos corporalmente, que está en la conciencia del ser y que significamos desde la resistencia que nos opone, ejercemos nuestro juicio, el que podríamos denominar —en un sentido estricto— juicio de realidad. Desde este juicio de realidad construimos las ideas normales, que constituyen nuestro capital ideativo. Cuando existe un trastorno en el proceso de ideación, aparece un tipo de ideas patológicas, las ideas delirantes. En otras palabras, si la vivencia de la realidad es “correcta”, nuestro juicio de la realidad será adecuado y conformaremos un capital ideativo normal. Si la vivencia de realidad se perturba, nuestro juicio de la realidad será errado, y las ideas que construyamos a partir de ese juicio serán desviadas.