II.2.1.a. Memoria de fijación

En esta fase se captan los materiales a través de la sensación y percepción, y se procede a fijarlos en la estructura y organización psicobiológica. 

1. Factores que influyen en la capacidad de fijación  

La capacidad de fijación es muy variable de un individuo a otro, y está condicionada tanto por factores afectivos —el interés y la motivación, el entusiasmo, etc. — como por la atención y concentración. Por supuesto que también depende de la intensidad del estímulo externo que se memoriza. 

L’Hermitte y Signoret, en su trabajo “Analyse neuropsychologique et différenciation des syndromes amnésiques” (1972) señalan: “Cuando las informaciones penetran en nuestro sistema nervioso, son primeramente registradas por un sistema perceptivo específico, donde se mantienen bajo la forma de trazos sensoriales durante un período que no excede probablemente de un segundo. Luego alcanzan un sistema de retención inestable, la memoria a corto plazo, que permite la acumulación de los trazos durante una duración muy breve, del orden de uno a dos minutos”. 

2. Momentos del proceso de fijación 

El proceso de fijación del material mnéstico incluye dos momentos cuya delimitación tiene relevancia psicopatológica.

  • Memoria inmediata, memoria de segundos o capacidad de registro. Es el primer momento. Como está muy condicionada por el nivel de atención, describimos en ese capítulo la prueba que mide esta memoria inmediata, la cual corresponde a la retención de dígitos. 
  • Memoria reciente, memoria de minutos o capacidad de retención. Es el segundo momento del proceso de fijación de la memoria. Esta memoria depende menos del nivel de atención, y se investiga solicitando al paciente que recuerde los temas tratados, o lo que sucedió en la entrevista minutos antes. Una forma más sistematizada de investigarla es solicitarle al paciente que se aprenda 3 o 4 palabras no relacionadas entre sí, y luego de 3 minutos preguntarle por ellas. Esta capacidad va aumentando hasta la pubertad y luego con el tiempo va declinando, haciéndose muy evidente su déficit en personas seniles.